Oliver

De regreso de nuestras vacaciones, nos desviamos de la ruta para ir expresamente a este restaurante. Acertamos de pleno. Dispone de un gastrobar para hacer unas tapas y un restaurante a la carta. Comimos en el restaurante. La decoración está muy conseguida, todo nuevo y moderno. Todos los platos están muy elaborados con una presentación excelente. Todo en su punto y muy sabroso. Muy atento el camarero y un precio justo. MUY RECOMENDABLE.